La principal amenaza que se cierne sobre el horizonte legal de Donald Trump, una vez perdida la inmunidad presidencial, es la larga y extensa investigación que dirige Cyrus Vance en la fiscalía de Manhattan. Este lunes, el expresidente ha sufrido una importante derrota en ese caso al rechazar el Tribunal Supremo el último intento de sus abogados de ocultar su historial financiero: los contables de Trump deberán entregar sus declaraciones de impuestos y otros documentos que solicita la fiscalía neoyorquina. La investigación llevaba cuatro meses atascada por la negativa de Trump a entregar la información. El fiscal Vance ha celebrado la resolución del Supremo con un tuit de tres palabras: “El trabajo continúa”.
