Las declaraciones que con tanta seguridad se hacen sobre las diferencias psicológicas entre sexos siempre presentan a las mujeres más en desventaja desde el punto de vista material, biológico e intelectual que a los hombres. Cada vez que doy con una afirmación que asegura que las mujeres no son capaces de lograr algo por naturaleza, no puedo evitar recordar sentencias similares que se han hecho a lo largo del tiempo sobre la inferioridad femenina y las distintas maneras en que estas lamentables deficiencias han sido formuladas por sus defensores.
