Dicen que el gran músico argentino del siglo XX tenía mal carácter. “No, era un hombre muy dulce, tierno, timidísimo”, afirma Laura Escalada, su viuda. “Ocurre que todos tenemos un carácter áspero si nos pegan”. Y a Astor Piazzola le pegaron bastante en Argentina. “Le insultaban por la calle, incluso un taxista le acusó de ser el asesino del tango y se negó a llevarle”. A los 100 años de su nacimiento, esa bronca se ha transformado en amor. Buenos Aires rinde estos días todos los homenajes posibles a un marplatense criado en Nueva York que reinventó la música popular porteña.
