El Departamento de Defensa de Donald Trump tardó más de tres horas en aprobar una solicitud para enviar a la Guardia Nacional de Washington para sofocar el asalto al Capitolio del pasado 6 de enero. Así lo ha denunciado este miércoles, en una comparecencia en el Senado, el general William Walker, al frente de dicha unidad militar. Según Walker, las “inusuales” restricciones que se le impusieron desde el Pentágono en los días previos a la insurrección le impidieron proceder con mayor rapidez.