Rachael Denhollander (Michigan, 36 años) fue la primera gimnasta que acusó públicamente de abusos sexuales a Larry Nassar, el antiguo médico del equipo olímpico de gimnasia de Estados Unidos. También fue la última de las más de 150 víctimas que habló en el juicio contra el mayor depredador sexual de atletas de la historia, condenado a 175 años de prisión. Cuatro años después de que se sintiera obligada a contar a los medios cómo Nassar la penetraba con los dedos bajo la apariencia de un tratamiento médico, asegura que la Federación de Gimnasia de Estados Unidos (USAG), una vez más, ha traicionado a las supervivientes. “Para ellos es un problema de relaciones públicas y no de corrupción y abuso”, afirma por teléfono la abogada y activista desde su hogar en Kentucky.
