Las autoridades europeas consideran el caso GameStop una anomalía estadounidense con pocas probabilidades de repetirse en suelo comunitario. El presidente de la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA, por sus siglas en inglés), Steven Maijoor, ha enviado ese mensaje este martes en una comparecencia ante el Parlamento Europeo. Basa su idea en que solo 20 compañías europeas —que no citó— tienen posiciones cortas superiores al 10% de sus acciones. Un escenario muy diferente a los de la empresa de videojuegos GameStop o la cadena de cines AMC, que contaban con una gran presencia de inversores bajistas. Ese detalle es clave, dado que las recompras que debieron efectuar dichos fondos sirvió de gasolina para sus cotizaciones cuando los pequeños inversores se lanzaron a comprar acciones de ambas, lo que multiplicó el efecto de su entrada masiva.
