Una protesta (“¡no he hecho nada!”), una súplica (“solo estoy tratando de llegar a casa”) y un angustioso grito de auxilio (”¡mamá, mamá, mamá!”) retumbaron en la noche del viernes en Estados Unidos (madrugada del sábado en España), tras la publicación de un brutal vídeo en el que se ve (y se oye) a cinco policías de Memphis (Tennessee) dar el 7 de enero una mortal paliza a Tyre Nichols, un joven de 29 años. Tres días después, el muchacho murió en el hospital a causa de los golpes.
