El Tribunal Constitucional decidió este lunes mantener la prohibición de la concentración convocada por los sindicatos con motivo del 8-M, pero el recurso de UGT y CC OO consiguió otro objetivo muy relevante, el de asegurar que el tribunal de garantías trate de clarificar en qué supuestos una situación de emergencia sanitaria puede justificar la supresión del ejercicio de derechos fundamentales, como los de reunión y manifestación. Los magistrados, convocados para un pleno de urgencia, acordaron admitir para ello a trámite el recurso de amparo presentado por los sindicatos, al tiempo que denegaban la medida cautelar solicitada.
