La semana pasada, en un juicio por violencia sexual, la defensa del acusado preguntó cómo era posible que la víctima hubiese vuelto a salir a bailar si la agresión se produjo en una discoteca. El pasado año, el acuerdo de conformidad por el que dos policías municipales de Estepona no entraron en prisión tras agredir a una chica de 18 años a la que habían dado el alto poco antes en un control policial, provocó comentarios sobre lo verdadera de aquella denuncia. Cuando se conoció en 2019 que el futbolista Cristiano Ronaldo había pagado más de 300.000 euros a la modelo Kathryn Mayorga, la mujer que lo había denunciado por violación en 2009, la idea que sobrevoló fue que la denuncia era falsa y ella solo quería dinero. Justo la contraria, —que la denuncia es verdadera porque ella no quiere dinero—, fue la que saltó hace unos días, cuando la mujer que ha denunciado a Dani Alves por violación renunció a su derecho a ser indemnizada por el futbolista.
